sábado, 18 de junio de 2011

EL LIMBO

Es toy leyendo una noticia: AHORA LA IGLESIA CATOLICA ELIMINA DE LA DOCTRINA EL
LIMBO AHORA LOS NIÑOS QUE MUEREN SIN SER BAUTIZADOS PUEDEN IR AL CIELO:
La Comisión Teológica Internacional de la Iglesia Católica decidió eliminar el concepto de limbo, el lugar donde según la tradición iban a parar los niños que morían sin ser bautizados.
Durante siglos, una tradición católica surgida en la Edad Media reservó al limbo una dimensión propia, distinta del cielo, el purgatorio o el infierno
Según la Comisión Teológica Internacional, dependiente de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el estudio sobre el limbo resultaba urgente ya que el número de niños no bautizados ha crecido considerablemente” y por ello debía haber una reflexión sobre la posibilidad de salvación Al leer esta noticia, no puedo dejarla pasar pues nos han dicho por activa y por pasiva y en los cementerios de los pueblos hay un trozo de tierra sin bendecir para los niños que morian antes de ser bautizados, que estaban en pecado y que no podian ir al Cielo, que estaban condenados todas sus existencias. Yo como espirita lo veo tan sumamente fuerte hoy si ayer no, he mirado la codificación, el libro el Cielo y el Infierno o la Justicia Divina de Allan Kardec y me he puesto a escribir lo que le dictaron los Espiritus.
EL LIMBO
8. Verdad es que la iglesia admite una posición especial en ciertos casos particulares.
No habiendo hecho mal los niños que mueren en edad temprana, no pueden ser condenados al fuego eterno; por otra parte, no habiendo hecho ningún bien, ningún derecho tienen a la felicidad
suprema. Están entonces, dice la iglesia, en el limbo, situación mixta que nunca ha sido definida, en la que aunque no padezcan, no disfrutan tampoco de la dicha perfecta. Pero, puesto que su suerte está fijada irrevocablemente, están privados de esta por toda la eternidad. Esta privación, cuando no dependió de ellos que fuese de otro modo, equivale a un suplicio eterno inmerecido. Ocurre lo mismo con los salvajes, que no habiendo recibido la gracia del bautismo ni las luces de la religión, pecan por ignorancia, abandonándose a sus instintos naturales, por lo cual no pueden tener ni la culpabilidad ni los méritos de los que han podido obrar con conocimiento de causa. La lógica más sencilla rechaza tal doctrina en nombre de la justicia de Dios. La justicia de Dios está enteramente contenida en estas palabras de Cristo: “A cada uno según sus obras.” Pero hay que aplicarla a las obras buenas o malas que se realizan libre y voluntariamente, únicas de las que somos responsables, en cuyo caso no están ni el niño, ni el salvaje, ni aquel de quien no dependió ser ilustrado.

1 comentario:

pENSAMENTO & eSPIRITUALIDADE dijo...

Muy bien! Ellos han tomado el dogma absurdo de "Limbo". Sin embargo, esto todavía no está de acuerdo con la justicia y la sabadoria de Dios como nosotros lo entendemos. Si usted dice que un bebe nace y pronto enseguida fallece, indo para el "Cielo", aun así compromete la Justicia Divina. Sin la variación de exist↑ncias, es muy difícil de creer que Dios es justo y bondadoso. Bueno! Por lo menos el Dios de los espiritas, que es lo mismo interpretado por Jesus, así es...